El futuro del monumento al crucero Baleares de sa Feixina volverá a ser tratado en el pleno municipal de la próxima semana, el último antes las vacaciones del mes de agosto.

El grupo municipal del PP en el Ayuntamiento de Palma ha presentado esta mañana una proposción urgente en la secretaria del Ayuntamiento en la que se exige al equipo de gobierno que paralice la demolición del obelisco y que respete el dictamen de la ponencia técnica de Patrimonio del Consell de Mallorca que, por dos veces, se ha pronunciado a favor de su preservación como Bien Catalogado,

No obstante, tanto la comisión de Patrimonio como el pleno del Consell de Mallorca, con los votos favorables del equipo de gobierno y basándose en los informes técnicos de la institución y de órganos consultivos como el Institut d'Estudis Baleàrics, votaron el pasado martes en un pleno extraordinario su no preservación.

En un segundo punto de la proposición de los conservadores de Cort también se insta al equipo de gobierno a paralizar la tramitación del expediente de aprobación del proyecto de demolición, que se quiere retomar una vez que se disponga de la notificación del Consell en el sentido de que el monolito no está preservado, así como de su posterior licitación, hasta que no se hayan resuelto los recursos que se van a presentar ante el Consell en contra de la no preservación, además de las acciones judiciales emprendidas o que se puedan emprender por parte de diversos colectivos contrarios a la demolición del monumento.

Para la portavoz de este grupo muncipal en Cort, Margalida Durán, "no es de recibo que los caprichos de ciertos políticos pesen más que el criterio de los técnicos". Ha reconocido que su grupo confiaba en que el Consell preservara el monumento y criticó la falta de valentía del PSOE, Més y Podemos porque "no incluyeron en sus respectivos programas electorales la demolición del monolito". Insistió en que en 2010 el Ayuntamiento de Palma, con un amplio consenso entre todos los grupos municpales, adaptó el monumento a la Ley de la Memoria Histórica.

Por su parte, el concejal Fernando Rubio ha lamentdo que desde Cort se encarguen informes "ideológicos" en lugar de a los técnicos municipales cualificados para ello. Insistió en que "han recurrido a una persona de fuera de la casa de la que no tenemos acreditada su imparcialidad", en referencia al emitido a instancias de la consejalía de Cultura y Memória Histórica por el doctor arquitecto y catedrático de historia del arte y de la arquitectura Josep Quetglas.