El consorcio de la Platja de Palma, entidad en proceso de disolución a la que el Ayuntamiento de Palma cedió las competencias urbanísticas de la zona turística, rechazó ayer la posibilidad de que se construya un circuito de karting en terrenos rústicos situados junto a la Porciúncula.

En su reunión de ayer, el consorcio definió que en esta zona rústica, calificada en el Plan Insular de Mallorca como Área de Transición de Armonización, en la que se permiten los usos complementarios al sector turístico, solo se podrán autorizar instalaciones deportivas cuyas actividades estén reconocidas por el Comité Olímpico Internacional.

De esta forma, se mantiene la posibilidad de que, en un futuro, se pueda desarrollar en esta zona, tal como prevé el Plan de Reforma Integral (PRI) de la Platja de Palma, algún equipamiento deportivo, aunque queda descartado el circuito de karts, puesto que no es un deporte olímpico.

La sociedad Forsiego S. A. proyectaba en la finca de Son Fortesa, situada en las inmediaciones de la Porciúncula, entre la autopista de Llevant y los núcleos de es Pil·larí y Sometimes, la construcción de un circuito de 1.580 metros, que se convertiría en las instalaciones de estas características más grandes de europa.

La sociedad, que había manifestado a los vecinos de la zona la intención de construir este equipamiento con el fin de recabar su apoyo, no cuenta con ninguna autorización municipal, aunque, en 2014, consiguió del Ayuntamiento el permiso para la demolición de unas construcciones existentes en la finca.

Para la ejecución del proyecto, los promotores deben presentar primero un plan especial que ha de incluir, entre otras cuestiones, la edificabilidad prevista.