Palma necesita disponer en verano del doble de agentes de la Policia Local con el fin de dar un buen servicio a la población, según el ranking por habitante que aconseja la Federación Española de Municipios y Provincias de España (FEMP).

En estos momentos, según el jefe de la Policia Local palmesana, Josep Palauzié, la plantilla es de 876 agentes, y no todos ellos están en la calle, mientras que, para alcanzar la ratio de dos policías por cada mil habitantes que aconseja la FEMP se debería disponer de una plantilla de 1.500 agentes a lo largo de la temporada alta, cuando la población de hecho de la ciudad prácticamente se duplica.

En estos momentos la plantilla no se puede incrementar debido a la denominada Ley Montoro o de estabilidad presupuestaria. Pese a ello, desde la jefatura de la Policía Local se está realizando un estudio con el fin de programar el incremento de las plantilla en los próximos años y cómo se podrá afrontar presupuestariamente.

A esta situación de escasez en cuanto a efectivos y que no se han convocado oposiciones desde 2012, que están bajo investigación judicial, se suma la inestabilidad laboral de buena parte de la plantilla, puesto que 99 agentes de los 876 que la conforman son interinos, en algunos casos desde hace una década. Además, se trata de una plantilla envejecida, con numerosos agentes con edades que se sitúan entre los 50 y 60 años.

Tanto el alcalde, José Hila, como la concejala de Seguridad Ciudadana, Angélica Pastor, explicaron que se va a iniciar un procedimiento extraordinario de consolidación de los interinos, que culminará con la convocatoria de oposiciones, en las que los agentes que conforman este colectivo van a tener ventajas en relación a los aspirantes que procedan de fuera.

Convalidación de pruebas

En concreto, Pastor explicó que, de acuerdo con el Real decreto 1/2017 de la conselleria de Hacienda y Administraciones Públicas los agentes que estén al día con las pruebas físicas y psicotécnicas no tendrán que realizarlas de nuevo, aunque se deberán someter a una serie de pruebas de conocimientos en las que se incluirá el conocimiento del municipio, con el fin de dar preferencia a los agentes que ya trabajan en Palma.

La incorporación de estos agentes interinos como fijos, cuyo proceso se prevé haya culminado en el primer trimestre del próximo año, no va a suponer más gasto para las arcas municipales, según Pastor, e incluso en algunos casos puede producirse un ahorro en costes a la Seguridad Social.

El alcalde, José Hila, afirmó que la medida "es un paso más en la apuesta por la Policía Local" ya que "queremos dar estabilidad a la plantilla para reparar una injusticia de hace muchos años".