Más de un tercio de los hogares de Palma está formado por una sola persona. En total hay 176.792 "unidades de convivencia" en la capital balear y en casi una cuarta parte residen menores de hasta 15 años. De los hogares con niños y adolescentes, más del 13% son monoparentales y la mayoría con una madre en lugar de un padre como cabeza de familia. Estos y otros muchos datos forman parte del estudio elaborado por el área de Bienestar y Derechos Sociales de Cort bajo el título 'Detecció de situacions d'exclusió social de la població de Palma', que ayer fue presentado a los profesionales del llamado tercer sector, es decir, de servicios sociales.

Además de un análisis general, el informe pone de relieve cuáles son los barrios más vulnerables de Ciutat: La Soledat, Son Gotleu, Son Ximelis, Verge de Lluc y Pere Garau, basándose en una serie de factores. La regidora, Mercè Borràs, detalló que se caracterizan principalmente "por tener una densidad de población elevada y un valor medio de la vivienda más bajo; una elevada tasa de instrucción insuficiente -es decir, no saber leer ni escribir o no tener estudios- y un bajo índice de personas con titulación universitaria".

Servicios Sociales de Cort tramitó en 2015 una alta tasa de expedientes (muchos de ellos con ayudas) y de incidencia en estas barriadas, otro de los elementos que ponen de relieve su mayor vulnerabilidad. Pese a que "en muchos casos percibir ayudas es un factor destacado", el estudio señala que la situación de vulnerabilidad también puede venir determinada por causas como la densidad y estructura de la población o el nivel educativo, que es lo que ocurre en las citadas barriadas.

En el conjunto de Palma, la tasa de instrucción insuficiente casi alcanza el 20%. La más elevada se encuentra en Son Gotleu, con el 48% de la población que no sabe leer ni escribir o que no tiene los estudios básicos. En el barrio de Nou Llevant la tasa llega al 39,7% y en Verge de Lluc, al 39,2%.

Actuaciones

La finalidad del estudio es "que sirva para planificar el trabajo del área", como destacó la concejala de Bienestar y Derechos Sociales del Ayuntamiento. Tenían muy pocos datos respecto a vulnerabilidad y no estaban desgranados por barriadas, pese a su importancia para saber dónde actuar en primer lugar. A partir de ahora, se centrarán en ellos para acercarse a los palmesanos que más necesitan la ayuda de los servicios sociales, afirmó Borràs.

La aproximación ya se ha empezado esta legislatura con el desdoblamiento del centro de Llevant Nord, que atendía a los residentes de Son Gotleu y Pere Garau, entre otros, y estaba desbordado al inicio del mandato del equipo del Pacto. Decidieron abrir uno nuevo en Pere Garau, el llamado Gregal, que "permite que el centro de Llevant Nord atienda en exclusiva las necesidades del barrio de Son Gotleu", en palabras de la concejala. Además, en enero de este año se abrió un punto de atención social en la Soledat, en el edificio municipal de Can Ribas, con el objetivo de reducir la lista de espera del local de Llevant Sud, en la calle Joan Alcover.

La red de Servicios Sociales del Ayuntamiento tiene actualmente diez centros, aunque ayer Mercè Borràs avanzó que se construirá otro en Son Ximelis. En un par de semanas será licitado el proyecto arquitectónico. El acercamiento contribuye a "facilitar el acceso a las personas necesitadas" y, para los trabajadores del área, "conocer mejor la realidad del territorio y así responder a sus necesidades", añadió.

La presentación del estudio en el consejo municipal de Servicios Sociales -un órgano participativo formado por más de 50 entidades del tercer sector, administraciones y colegios profesionales- sirvió asimismo para informarles de que "se aumentarán las ayudas a las familias más desfavorecidas, dando prioridad a aquellas con menores; se rediseñarán los servicios de dependencia social y de familias; se impulsará la colaboración con el tercer sector a través de la convocatoria de subvenciones y desarrollando conciertos sociales; y se fomentará el trabajo comunitario y en red", en palabras de la responsable política.

Soledad de los mayores

Otro aspecto que preocupa es la "soledad anciana residencial", porque se está incrementando, como ya se puso de manifiesto el pasado mes de diciembre durante la presentación de un estudio del Observatorio de la Igualdad. El 28% de los hogares tiene al menos una persona con más de 65 años y, de los 62.261 palmesanos que viven solos, 17.184 son mayores de esa edad. Y de estos, el 71% son mujeres. Por este motivo, tanto desde el área de Igualdad como desde Bienestar Social pretenden impulsar políticas encaminadas a dicho colectivo.