Encabezados por la pancarta 'Queremos nuestros caminos abiertos', unas 200 personas se manifestaron ayer para exigir a la promotora del campo de golf de Son Quint que reabra el tramo aún cerrado del camino público de Puigpunyent. Se trata del que popularmente se conoce como la 'ruta del colesterol' y que, según explicó la presidenta de la asociación de vecinos de Son Rapinya, Marisa Bonache, "más de la mitad de este recorrido forma parte del antiguo camino vecinal que unía Son Rapinya con Puigpunyent y la Vileta con Estellencs".

Mientras coreaban " volem els nostres camins" con la música de flabiols acompañando la marcha, caminaron durante alrededor de una hora desde el primer barrio hasta el segundo por la carretera de Son Puig. Llegaron a las 11,30 al aparcamiento del cementerio de la Vileta, donde se encuentran los dos accesos, uno cerrado y el otro abierto, pero todavía con los bloques de marés de la antigua barrera, que exigen que se retire. Allí se leyó un manifiesto en el que explicaron sus reivindicaciones tras los cierres efectuados por la promotora del golf.

Un representante del grupo Pro Camins Públics de Puigpunyent también exigió que se coloque un cartel que señale su uso forestal y peatonal y prohíba la circulación de vehículos, como los quads.