Puertas y marcos de ventanas desgajadas, algunas quemadas, calentadores, cristales, gomas de neumáticos, muebles viejos tirados y sacos con restos de obra se acumulan al final de la calle Arxiduc Lluís Salvador. Entre los escombros, un letrero en el que se lee: "No tirar más basura. Gracias". Un vecino ha alertado a los servicios de Emaya, que ha levantado acta a través de sus técnicos de Medio Ambiente.

La sorpresa ha sido mayúscula ya que, tal y como indican desde la empresa pública, "no hay tantas urbanizaciones sin recepcionar cerca de Palma, ycon semejante acumulación de restos". "Nos llegan muchas fotos a través de redes sociales, pero esta imagen es bestial", reiteran desde Emaya.

En Palma han aumentado los vertederos ilegales al hilo de la recuperación económica, tal y como publicó este diario la semana pasada. Técnicos de Emaya han comprobado la acumulación de restos de obras en solares producidos en los dos últimos meses de 2017.

El denunciado ayer está localizado en la prolongación de la calle Arxiduc, en la parte nueva integrada en una urbanización que no está recepcionada. De ahí que Emaya no actúe puesto que sus calles no cuentan con dotación de servicios. La empresa pública ha levantado acta, y se ha puesto en conocimiento de la Policía Local.

El responsable de retirar estos escombros es el promotor y será esta persona la que deba retirar los residuos. En caso contrario, y concluido el plazo, el Ayuntamiento actúa subsidiariamente, pero después se le pasa factura al propietario además de multarle.

En la zona cercana a este vertedero ilegal, hay varios solares vacíos. Se observa, sin embargo, cierto repunte en las calles cercanas.

Denuncias

En el primer trimestre de este 2017, se han impuesto 365 denuncias por mes. En su mayor parte, los infractores son particulares, seguidos de pequeñas y medianas empresas y bares y restaurantes, en una proporción inferior.

Se trata de denuncias de basuras arrojadas fuera de los contenedores, de restos, sobre todo, de obras, en vertederos ilegales y de trastos tirados a la calle al margen de la normativa.