Un grupo de bomberos protestaron ayer en el pleno de Cort con el torso desnudo para llamar la atención por las condiciones laborales en las que se ven obligados a trabajar.

Con el lema Bombers cremats, que lucían en la espalda, escucharon la intervención del sindicalista Pedro Castro, de CC OO, a la que se sumó también después Tomás Casado, de UGT, quien exigió la dimisión de las concejalas de la Función Pública, Aurora Jhardí, y de Seguridad Ciudadana, Angélica Pastor.

La protesta se produce después de que los funcionarios municipales no hayan podido percibir en la nómina de este mes el complemento de productividad ni parte del kilometraje, tras el informe desfavorable realizado por la exjefa del departamento de Personal y de la intervención municipal.

Lo anterior ha supuesto que los empleados municipales han dejado de cobrar una cantidad global de dos millones, lo que se traduce en cantidades de entre 300 a 500 euros por persona cada seis meses. El equipo de gobierno se comprometió a solventar esta situación, que se arrastra desde 2010, cuanto antes.

Jhardi, que actuó ayer como alcaldesa accidental al encontrarse su titular, José Hila, participando en Estrasburgo en un comité de regiones europeas, quiso parar el pleno para que Castro pudiera continuar con su intervención, algo a lo que el sindicalista se opuso exigiendo "una solución" como condición para abandonar la sesión.

Después de unos diez minutos de tira y afloja entre el sindicalista y la presidenta de la sesión, con gritos de los presentes exigiendo la dimisión de Jhardi y Pastor, los manifestantes abandonaron el salón permitiendo que el pleno prosiguiera con normalidad. El grupo de bomberos continuó en el salón ya con las camisetas puestas, mientras sus compañeros siguieron protestando en el zaguán. Posteriormente, trasladaron su indignación al parque colocando unas pancartas en la torre, adornada con humo naranja y con los lemas Bombers en lluita y Volem fets i no paraules. El representante del colectivo de bomberos, Juanan González, manifestó que su presencia en la sesión se debe a la necesidad de "expresar todo el malestar que han provocado dos años de falsas promesas, y para recordaros la completa desatención que tenéis con nuestro servicio, y lo que supone esto para la ciudadanía". Añadió que "el área de Seguridad Ciudadana está gobernada con mano firme y justiciera, con una política de actitud implacable e incendiaria, que no admite réplica ni oposición, algo más propio de viejas autarquías, o nuevas políticas norteamericanas".

La teniente de alcalde Aurora Jardhi explicó que se ha concertado una reunión con el alcalde y Antoni Noguera, aunque matizó que tanto ella como Pastor continuarían siendo responsables de la negociación.