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Palmario

El PP reclama papeles en el punto de mira judicial

Un laberinto de vallas en la plaza de España. j. C.

Es una cuestión recurrente. Cuando se ha producido alguna actuación judicial en la que ha estado involucrado mediante declaración de testigos protegidos o no, el diputado conservador y concejal del PP en el Ayuntamiento de Palma, Álvaro Gijón, su grupo solicita inmediatamente de la secretaría municipal tener acceso a toda la ducumentación que obre en poder del Ayuntamieno relacionada con el asunto que se está investigando. Pasó con el contrato de la ORA, adjudicado en 2013 a la oferta económica más elevada y ahora se ha vuelto a reproducir la misma actuación de los concejales conservadores en relación a los supuestos tratos de favor de Cort a las discotecas de Cursach del paseo Marítimo con respecto a las paradas de taxis y de autocares. Como representantes municipales, el grupo conservador y cualquier otro tiene derecho a disponer de toda la documentación que obre en poder del Ayuntamiento relacionada con cualquier tema sobre el que deban decidir. No obstante, llama la atención a más de un concejal que la documentación requerida por el grupo conservador es la que cualquier abogado defensor querría para su cliente. En definitiva, se preguntan si cualquier otro ciudadano o funcionario que no sea concejal presuntamente implicado en casos de corrupción, tendría las mismas facilidades a la hora de acceder a la documentación que obra en poder del Consistorio.

Un laberinto de vallas de obras en la plaza de España

Finalizadas las fiestas de invierno, el área de Infraestructuras del Ayuntamiento de Palma ha vuelto a la carga con las reparaciones del pavimento de la plaza de España. Con el buen tiempo, día tras día, los operarios de este departamento despliegan las vallas de obras para señalizar zonas de la plaza en las que se sustituyen las baldosas de pizarra por tacos de cemento, que simulan con más o menos acierto el pavimento de piedra. Algunos días la plaza se convierte en un auténtico laberinto que los ciudadanos deben sortear como pueden. La sustitución de la pizarra por cemento, iniciada poco después de la ejecución de la remodelación de la plaza debido a la mala calidad y a la inoportunidad de la piedra instalada, ya ocupa, con un cálculo conservador, alrededor del 30% de la superficie de este importante enclave ciudadano.

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