La fuente de la plaza de la Reina luce su anillo de colores desde hace un par de semanas. La obra póstuma del arquitecto municipal Federico Climent, fallecido en abril de 2016, ha puesto color gracias al anillo o circunferencia de la fuente hecho a partir de 1.400 azulejos de color azul marino, dorado y blanco roto.
Las cerámicas son obra del artesano Joan Pere Catalán. Sustituirán las flores que han decorado este elemento urbano durante años, pero que salía muy caro cambiarlas. Las piezas tienen forma de triángulos y de deltoides, similar al rombo aunque irregular. Se han ido colocando de manera alterna, sin seguir un orden regular. El coste de la obra ha ascendido a 52.000 euros, aunque para el ayuntamiento será de 35.000 ya que el resto lo costeará el contratista, la empresa Rojo.
Además del mosaico de colores hay una iluminación con luces led con colores azul, naranja y blanco que dará color a la circunferencia de cerámica. Climent estuvo de acuerdo con los colores blanco roto y dorado, pero no llegó a tiempo de dar su conformidad al azul marino. Català Roig explicó que "es un tono con muchos matices”.
