Ya no es solo que las aceras estén esportilladas con sus baldosas rotas y sucias, llenas de manchas de aceite, es que tal y como se muestra en la fotografía, en la calle Foners el socavón es peligroso. Su tamaño podría provocar un accidente muy serio. El hoyo se ha convertido en una papelera en la que se tiran envases de gran tamaño de plástico. ¿Cuánto tardarán en arreglarlo?