El juez Manuel Penalva ha mandado a prisión al empresario Antoni Roig, el exgerente del IME y el jefe de mantenimiento, tras una jornada maratoniana en la que ha tomado declaración a las cuatro personas que el martes detuvo la policía, entre las que tambien se encontraba un empleado municipal.

Penalva ha empezado a tomar declaración por la mañana al primero de los cuatro detenidos por el nuevo caso de corrupción que se ha descubierto en la Empresa Municipal de Deportes del Ayuntamiento de Palma. El primero en declarar ha sido Antonio R., antiguo gerente de las instalaciones deportivas de Palma, que fue el único de los cuatro detenidos que el martes quiso declarar ante el Grupo de Blanqueo de Dinero de la Policía de Palma, que ha practicado las detenciones.

El juzgado está investigando si el Ayuntamiento de Palma, en la anterior legislatura, amañó el concurso para beneficiar a la empresa Roig Instalaciones, que también está siendo investigada por la presunta manipulación de la concesión del servicio de la ORA de Palma. El propietario de esta empresa y el gerente también fueron detenidos y han pasado el día en los calabozos esperando que el juez les llamara a declarar.

El cuarto detenido es el jefe de mantenimiento de las instalaciones deportivas, que está acusado de autorizar el pago de facturas falsas presentadas por la empresa por trabajos que nunca se realizaron, según sostienen los investigadores. De estos tres detenidos ninguno de ellos quiso declarar ayer ante la Policía y prefieren hacerlo hoy ante el juez. Se calcula que la malversación de fondos públicos que se investiga alcanza el millón de euros.