Los embalses de Cúber y Gorg Blau vierten a los torrentes el equivalente del agua que consume Palma en tres días. Ello es así porque las precipitaciones del último fin de semana han supuesto un incremento del volumen de líquido almacenado un 2,3% por encima de la máxima capacidad de ambas presas, lo que supone un excedente de casi 300.000 metros cúbicos de agua. En concreto, en la presa de Cúber de agua está 10 centímetros por encima de su cota máxima, mientras que en la del Gorg Blau el líquido rebosa 35 centímetros por encima incluso de la compuerta de 75 centímetros instalada el pasado diciembre con el fin de poder almacenar 500.000 metros cúbicos extra.

Si se tiene en cuenta que la ciudad consume aproximadamente unos 100.000 metros cúbicos de líquido al día, el volumen que rebosa por encima de las presas hacia los torrentes de Almadrà, en el caso de Cúber, y del Gorg Blau en el caso del embalse del mismo nombre, es el equivalente al líquido que consume la ciudad durante tres jornadas. Si no llueve más en la zona de los embalses, se prevé que sigan vertiendo a los torrentes de forma controlada a lo largo de los próximos tres o cuatro días.

Desde el pasado sábado por la mañana, cuando comenzó a rebosar la presa de Cúber, la Empresa Municipal d'Aigües i Clavegueram (Emaya), que gestiona el agua almacenada en las presas de la Serra, comenzó a bombear el máximo de volumen posible hacia Palma.

Visita del alcalde

Según informaron el alcalde de Palma, José Hila, y la presidenta de Emaya, Neus Truyol, que ayer visitaron las presas, en estos momentos se bombean 500 litros por segundo desde el Gorg Blau a Cúber. La misma cantidad pasa de este último pantano por gravedad hacia la estación de tratamiento de Lloseta y de ahí a Palma.

De esta forma, el volumen máximo de agua procedente de los pantanos que puede ser utilizada durante un día para el abastecimiento de Palma es de 43.000 metros cúbicos, cifra que no alcanza la mitad del consumo de la ciudad.

Con el fin de aprovechar al máximo al agua almacenada en los embalses desde ayer por la mañana se está suministrando líquido a Calvià y, a través de Abaqua, se está estudiando la posibilidad de abastecer a otros municipios mediante la ejecución de una conexión a la altura de Consell entre la tubería procedente de los pantanos con la de sa Marineta.

Desde ayer por la mañana también se está aprovechando al máximo el agua que mana de las fuentes de la Vila, d'en Baster y de Mestre Pere, una vez que ha bajado considerablemente la turbidez del líquido. De hecho, en estos momentos, solo se está utilizando agua de estos manantiales y la de los pantanos para el suministro.

Pese a la noticia positiva que supone disponer de los 13 hectómetros cúbicos da agua procedente de los pantanos, la presidenta de Emaya, Neus Truyol, recordó que éstos solo proporcionan el 30% del líquido que consume la ciudad en un año, por lo que es preciso contar con otros recursos. El líquido procedente de las fuentes es un recurso puntual, por lo que se seguirán necesitando los acuíferos subterráneos, que se recuperan más lentamente y se deben gestionar de forma sostenible para evitar la sobreexplotación y la salinización. Se prevé que tampoco se pueda prescindir del agua de la desaladora, aunque es probable que no se tengan que comprar los 8,5 millones comprometidos.