Casi nueve de cada diez pubs y discotecas de Palma tienen irregularidades. Así lo informó ayer la Policía Local después de una campaña en la que han inspeccionado a todos los establecimientos del municipio con una licencia para poner música.

En las últimas dos semanas la Patrulla Verde ha revisado los 71 locales que tienen autorización de tipo B, es decir, que pueden reproducir música (cafés teatro, pubs, discotecas o karaokes). Los agentes encontraron que 25 establecimientos ya estaban cerrados o se habían reconvertido, pese a tener la licencia en vigor: 18 estaban abandonados y 7 habían cambiado de actividad (ahora eran viviendas, gimnasios u hoteles).

De los 51 establecimientos que permanecen abiertos, solo 7 pasaron limpios el examen de los agentes y tenían toda la documentación en regla.

A los 44 locales restantes les han abierto expediente por una o varias infracciones. Todas son de carácter leve, por lo que ningún establecimiento fue precintado. Además, todos pasaron la prueba del sonómetro y no se detectaron excesos de ruidos. Tampoco se observó que se superara el aforo permitido.

Esos 44 pubs y discotecas sancionados sumaron un total de 81 incumplimientos a las condiciones establecidas en su licencia. La infracción más repetida fue que los limitadores de sonidos, unos aparatos instalados para controlar que no hay excesos de decibelios, no habían pasado la revisión periódica obligatoria.

Los negocios también acumularon 9 actas por no exhibir la licencia. Se trata de una infracción puramente administrativa. Aunque los bares tenían los papeles en regla, están obligados a tenerlos en el local y mostrarlos cuando los agentes del orden se los requieran.

En algunos casos los bares tampoco exhibieron la póliza de seguros o el proyecto técnico de seguridad. También hallaron locales que no mostraban la placa de actividad a las puertas del establecimiento.

Sin vigilancia en la puerta

Asimismo, dos negocios fueron sancionados porque no tenían a una persona que actuara como filtro de entrada. Sirve para controlar que los clientes no saquen vasos de cristal ni hagan ruido cuando salgan a la calle.

Los controles se han realizado de manera preventiva de cara a las fiestas de Navidad. Los locales inspeccionados en esta campaña no incluyen los negocios sin licencia, de los que la Policía Local no dispone de un listado detallado y exhaustivo.

Fuentes del cuerpo municipal señalaron que en los casos de establecimientos que ponen música sin autorización el castigo es el precinto del bar.