El 40% de la flota de vehículos de Emaya funcionará con gas el próximo año, porque la empresa municipal adquirirá 33 nuevas unidades, que se sumarán a los siete camiones existentes que ya se mueven con este combustible mucho menos contaminante y más económico que el gasoil. Los 40 vehículos a gas natural comprimido (GNC) cuentan desde ayer con una 'gasinera' en las instalaciones de Son Pacs donde pueden repostar, ya que está conectada a la red general de gas y, además, puede almacenar cerca de 20.000 litros.

La estación está adaptada a los autobuses de la EMT, de los que 12 funcionan a gas, aunque en 2017 comenzará la renovación progresiva de la flota y los nuevos también irán con el combustible natural, tal como recordó ayer el concejal de Movilidad de Cort, Joan Ferrer, en la presentación de la gasinera. Por ahora, repostan en la central de Cas Tresorer, pero en el futuro lo harán en la nueva instalación de Emaya, que ha costado 1,5 millones de euros y ha contado con una ayuda de los fondos europeos Feder.

La presidenta de la empresa municipal, Neus Truyol, explicó que "el uso del gas supone para la atmósfera un 30% menos de CO2 y un 90% menos de emisiones de nitrógeno y azufre. Además, los camiones son menos ruidosos", una mejora muy importante en la recogida de residuos debido a que causarán menos molestias por la noche a los vecinos.

El alcalde de Palma, José Hila, destacó de esta infraestructura gasista que "es un paso más en el compromiso de sostenibilidad del actual equipo de gobierno del Ayuntamiento, así como un gran ahorro económico, ya que es un 40% más barato que el gasoil", tal como especificó.

La 'gasinera' de Son Pacs tiene seis dispensadores, de los que cinco son para vehículos pesados y uno para ligeros. La recarga de un camión se puede realizar en cuatro minutos, un tiempo que es equiparable al de los carburantes convencionales, según indicaron desde Emaya. La instalación está preparada además para poder cargar biometano, un proyecto futuro que podría proceder de las depuradoras de aguas residuales y el tratamiento de residuos, tal como añadieron.

La empresa municipal tiene como objetivo a medio plazo que el 100% de la flota de vehículos pesados sea de gas, así como las furgonetas o camiones ligeros. En cuanto a las nuevas barredoras que está previsto adquirir en una próxima licitación, la presidenta de Emaya especificó que serán eléctricas, un combustible que también están potenciando.