El barrio de Son Gotleu tendrá su propio mercadillo a partir del 11 de noviembre. Se tratará de un mercado en la calle que estará situado en el paseo arbolado de la plaza de Orson Welles y abrirá los miércoles y viernes por la mañana para no coincidir con el mercadillo de Pere Garau.
Allí se colocarán un máximo de 46 paradas, aunque tendrán una particularidad: en el proceso de selección para repartir los puestos no se premiará solo a los artesanos o a los pequeños comerciantes, sino que quienes sumarán más puntos son las personas que formen parte de colectivos vulnerables o en riesgo de exclusión social. Además, 10 de las 46 paradas se reservarán para una de las asociaciones de personas gitanas de la barriada.
El Ayuntamiento de Palma ha establecido unos criterios nuevos y distintos a los del resto de mercadillos de la ciudad bajo el argumento de que servirá como una plataforma de inserción sociolaboral. "La aplicación de estas cláusulas sociales va en la línea de lo que consideramos políticamente correcto en este equipo de gobierno. Queremos pasar de los mercados solidarios a la inserción de colectivos vulnerables", afirmó la regidora de Consumo de Cort, Antònia Martín (Som).
Otros de los criterios que se premiarán son la originalidad en los productos ofrecidos, no tener ninguna otra parada en un mercadillo municipal o formar parte de una asociación dedicada a la atención de personas en riesgo de exclusión.
Entre los productos que estarán a la venta hay frutas, verduras, textil, artesanía, objetos del hogar, mobiliario, maquinaria, libros de segunda mano, piensos o semillas. El precio de las paradas será el habitual (1,28 euros por metro y día).
