La salida de la autovía Ma-19 hacia el Coll d'en Rabassa y el centro comercial Fan Mallorca Shopping vuelve a estar abierta tras su cierre temporal por los atascos que se produjeron las primeras semanas de apertura de la nueva gran superficie. Sin embargo, la afluencia al centro ha disminuido un 30% durante los últimos días, por lo que si la situación permanece estable, el acceso por el desvío número 6 seguirá abierto, tal como afirmó ayer la responsable provincial de la Dirección General de Tráfico (DGT), Cristina Gago.

En una reunión entre la DGT; la consellera insular de Territorio e Infraestructuras del Consell, Mercedes Garrido; y el regidor de Movilidad de Cort, Joan Ferrer; entre otros cargos, acordaron volver a cortar el acceso al Coll desde la autovía en sentido hacia Llucmajor si se producen nuevos atascos, porque "la prioridad es que el desvío al aeropuerto de Son Sant Joan no se colapse", ya que es la principal vía de entrada y salida de la isla.

La DGT, a instancias del sector de Tráfico de la Guardia Civil, continuará observando cómo evoluciona la circulación en esta salida y si es necesario buscar otras alternativas a los cierres puntuales, ya que en momentos de máxima afluencia han llegado a contabilizar alrededor de 5.000 vehículos por hora en ese tramo, según especificó Gago. Por ello, Tráfico insta a los conductores que acudan a Fan a que utilicen la carretera de Manacor, el camí Fondo o el segundo cinturón ya concluido (Ma-30).

Después de asegurar el acceso al aeropuerto sin dificultades, la segunda prioridad es paliar los problemas circulatorios de los residentes del Coll d'en Rabassa. No obstante, la consellera insular advirtió de que "es complicado encontrar una solución porque hay viviendas" junto al puente que lleva a la Ma-30, así como a la incorporación a la autopista desde el Coll d'en Rabassa.

La alternativa definitiva será la vía conectora, aunque las obras no concluirán hasta 2019, ya que actualmente se encuentra en fase de licitación el contrato para la redacción del proyecto, que es muy complejo y puede durar unos nueve meses. Y después quedará la construcción, que se prolongará unos dos años, tal como especificó Garrido.

El proyecto consiste sobre todo en crear un enlace sobre la Ma-19 (la autovía de Llucmajor) con el fin de "diversificar la circulación en dos partes. Por un lado, habrá una salida hacia Fan Mallorca y Mercapalma, y por otro, hacia la vía conectora", detalló.