Desde el equipo de gobierno de Cort no solo se está de acuerdo en la necesidad de regular el denominado alquiler turístico vacacional solo en el centro y Santa Catalina se calcula que existen más de 7.000 pisos destinados a esta actividad que mueve a unas 22.000 personas, sino que han realizado propuestas al Govern. El teniente de alcalde Antoni Noguera explicó que quieren que se regule de distinta forma el denominado alquiler relacionado con la economía colaborativa, consistente en compartir la vivienda habitual con uno o varios arrendatarios, y el alquiler turístico propiamente dicho. En este último punto y con el fin de garantizar la existencia de viviendas de alquiler a bajo precio, desde Cort han propuesto que por cada piso destinado a esta actividad se deba ceder otro al programa Palma Habitada.