Las expectativas de inversiones públicas para la rehabilitación urbanística, económica y social de la barriada de Son Gotleu han sufrido un serio revés. La Unión Europea ha rechazado el proyecto presentado por el Ayuntamiento de Palma el pasado mes de marzo a la convocatoria Urban Innovative Actions (UIA) que incluía una serie de acciones a realizar en los próximos tres años por un importe de 5,8 millones, cinco de ellos (el 80%) a aportar por fondos comunitarios.

El área de Modelo de Ciudad y Urbanismo de Cort ha recibido un escrito de los responsables de la iniciativa en el que se les indica que, si bien el proyecto presentado por Palma fue considerado como "elegible", tras la evaluación realizada por un grupo de expertos "no ha sido preseleccionado para pasar a la etapa operativa".

Según el escrito remitido al Ayuntamiento los expertos que han evaluado el proyecto presentado consideraron que la "la propuesta ofrece algunos aspectos innovadores al abordar la pobreza urbana de la zona en cuestión tales como la realización de un centro de usos múltiples o el modelo de economía circular para la creación de empleo local". No obstante, el documento continúa diciendo que "la idea general presenta ideas y experiencias que no son nuevas y diferentes y que ya se han desarrollado con anterioridad".

Asimismo, se indica que la propuesta "no representa a una amplia variedad de sectores, ya que solo incluye a las instituciones públicas y una entidad privada", hecho que consideran "insuficiente para llevar a cabo todas las actividades descritas, a pesar de que los socios individuales tienen experiencia en el campo". Se indica asimismo que "los resultados esperados podrían crear un impacto real en el barrio y se describen de una forma adecuada y cuantificada". También se enumeran detalladamente los grupos locales e individuales involucrados señalando que ya se ha colaborado con ellos en otras ocasiones, por lo que "existe un interés local en el proyecto". Por último, el escrito afirma que "la propuesta presenta claramente aspectos que podrían ser de interés para otras ciudades". La iniciativa ahora rechazada está incluida en el Fondo de Desarrollo Regional Europeo (FEDER) y pretende apoyar económicamente proyectos piloto con el fin de identificar y ensayar nuevas soluciones para abordar cuestiones relacionadas con el desarrollo urbano sostenible. Según el teniente de alcalde de Modelo de Ciudad, Antoni Noguera, el rechazo del proyecto implicará la búsqueda de otras fórmulas de financiación para llevarlo a cabo globalmente o en parte.