Tras cuatro años de lucha de la comunidad de vecinos, Cort cerró finalmente ayer el bar El Rincón de los Amigos, en Pere Garau, al que revocó en enero la licencia de actividad porque incumplía de forma reiterada la ordenanza contra el ruido. La Policía Local acudió por la mañana a clausurar el establecimiento situado en la calle Benet Pons i Fàbregues 43 por orden del área de Urbanismo y Modelo de Ciudad. Desde 2012, este departamento había abierto ocho expedientes sancionadores por poner música sin permiso y otro por abrir sin licencia. Desde Sanidad le abrieron expedientes por incumplimiento de horarios y de la normativa contra el ruido. Además, presentaba todo tipo de deficiencias y causaba un sinfín de molestias a los vecinos de la finca, que llegaron a pedir ayuda al Defensor del Pueblo.
