La Empresa Municipal de Transports de Palma (EMT) celebra el centenario del transporte público en la ciudad con unos datos que señalan que el autobús público se está aproximando a las mejores estadísticas de su historia. Durante el primer semestre de 2016, la EMT ha recuperado 725.000 pasajeros, lo que supone un incremento del 3,8% respecto al mismo periodo del año anterior. En esos seis meses los autobuses públicos han transportado a 19,7 millones de usuarios.
Generalmente el segundo semestre tiene una mayor afluencia de viajeros de bus, sobre todo entre los meses de julio a octubre. Así que si se mantiene la tendencia el resto del año, la EMT volvería a superar la barrera de los 40 millones de pasajeros. Ese es el objetivo que se ha marcado el tripartito y que ayer recordó el alcalde de Palma, José Hila, tras la notable pérdida de pasajeros durante el mandato del PP con Mateo Isern al frente del consistorio.
La primera vez que la empresa municipal superó los 40 millones de pasajeros fue en 2007, año en que Catalina Cirer (PP) y Aina Calvo (PSOE) compartieron la vara de mando en Cort. El periodo entre 2007 y 2011 destacó por la creación de nuevos trayectos radiales de bus, es decir, de líneas que unían barrios del Eixample sin pasar por el centro. Esos cambios dieron los mejores resultados de pasajeros de la historia de la EMT. En 2008 y 2009 llegaron a los 42 millones. En 2010 superó los 43 y en 2011 marcó el récord absoluto de 43,5 millones de usuarios.
La crisis económica (si hay menos trabajadores, menos gente usa el bus) y los recortes que implantó el PP marcaron la etapa 2012-2015. En el 2012, el primer año completo del gobierno Isern, las estadísticas de la EMT sufrieron un descalabro. Perdió casi 5 millones de pasajeros, lo que supuso una caída de más del 11%. El 2013 también hubo un descenso, una tendencia que se revirtió tímidamente al año siguiente. Entre 2012 y 2014 se mantuvieron en los 38 millones de usuarios; en 2015 alcanzaron los 39,1 millones.
En cambio, el primer semestre del 2016 augura un resultado cercano, y probablemente superior, a los 40 millones de pasajeros. Entre las posibles causas, el alcalde Hila señala el cumplimiento de las frecuencias tras la contratación de 41 chóferes. Además, el aumento del turismo en la ciudad supone un incremento del pasaje en los buses.
Las tres líneas que más aumentan en el primer semestre del año circulan por zonas turísticas. A la cabeza del incremento está la línea 3 (Pont d'Inca-ses Illetes). Le sigue la línea 1 (aeropuerto-puerto). Y en tercer lugar, la línea 23 (Palma-s'Arenal-Cala Blava).
Los gestores de la EMT esperan que la renovación de la flota que comenzará en 2017 y el rediseño de algunas líneas sirvan para atraer a la ciudadanía hacia los autobuses municipales durante los próximos años.
