El concejal de Ciudadanos en Cort, Pedro Ribas, denunció ayer en el pleno extraordinario convocado por el PP que el exgerente de Emaya, Pedro Campaner, abandonó el cargo poco antes de finalizar el anterior mandato pasando a ocupar de nuevo el de director de Control de Riesgos y Auditoría "con el fin de poder cobrar la indemnización de 34.129, 66 euros cuando fue despedido por la actual dirección".

Ribas recordó que Campaner fue contratado por el anterior presidente Andreu Garau como director de Control de Riesgos y Auditoria, un cargo técnico del que tenía derecho a cobrar una indemnización en caso de ser despedido.

En 2013 fue designado gerente de Emaya, un cargo de designación política por el que, según Ribas, no tenía derecho a ser indemnizado.

Esta operación fue puesta de manifiesto por el concejal de Ciudadanos en el punto presentado por el PP en el que se afirmaba en estos 10 meses se habían incrementado los cargos directivos en un 50% con un coste de 300.000 euros.

La presidenta de Emaya desmintió rotundamente esta información afirmando que no solo no se habían incrementado los cargos directivos y técnicos, que eran los mismos que en el anterior mandato con distintas denominaciones, sino que se había producido "un ahorro de 60.000 euros". Denunció asimismo que el PP "confunda cargos directivos con técnicos" y que la empresa haya estado "dos años sin jefe de taller", pese a su importante flota.