Palma tendrá casi un centenar de policías locales más durante este verano. El dispositivo estival contará con los 42 agentes que habitualmente trabajan en el Distrito Litoral y otros 94 extra. La pasada temporada, el número de profesionales se incrementó en 42, por lo que el actual refuerzo sube más de un 100% respecto al año anterior, como destacó ayer el alcalde de Palma, José Hila, en la presentación de las novedades del verano en cuanto a seguridad ciudadana.

El dispositivo policial llamado Setur 2016 y que se pondrá en marcha a pleno rendimiento a partir del 23 de mayo contará con un total de 136 agentes para encargarse de la Platja de Palma, el centro de la ciudad, el paseo Marítimo y Cala Major. Además, la oficina de la Policía Local en la plaza de las Meravelles, en la Platja de Palma, abrirá durante las 24 horas y no solo de día, como ocurría hasta ahora, por lo que los turistas podrán presentar quejas y denuncias por la noche, según destacó la regidora de la Policía, Angélica Pastor.

Durante la jornada nocturna, el refuerzo policial será del 100%, debido a que este periodo del día "era muy mejorable", en palabras de Hila, quien destacó que "un principio básico es demostrar que Palma es un destino seguro. Es uno de los grandes objetivos y queremos que siga así y mejore". Por ello se han incrementado los efectivos locales y espera que la Policía Nacional haga lo mismo. "He hablado con la delegada del Gobierno, Teresa Palmer, y no me ha dicho que no se aumentarán, aunque lo tiene que mirar con el ministerio del Interior".

Otra novedad es la creación de un Observatorio de la Platja de Palma, en el que dos policías se encargarán de analizar los datos semanales sobre los problemas del trile, la venta ambulante, el exceso de ocupación de la vía pública y otro tipo de actividades económicas que pudieran estar cometiendo una irregularidad, tal como enumeró Pastor. Añadió que esta información servirá para actuar según las necesidades y se realizarán campañas informativas para paliar los problemas.

El jefe de la Policía Local, José Antonio Bravo, explicó que el "desafío" de la ciudad es que la zona turística no se limita ahora a la Platja de Palma ni al verano, sino que los visitantes también abarrotan el centro y "hay días en los que se duplica la población", dijo poniendo como ejemplo que ayer había 22.000 cruceristas en Ciutat. "El esfuerzo es ímprobo, porque el modelo turístico ha cambiado y la respuesta policial también debe modificarse", según sus palabras. Se irán adaptando a cada situación concreta, como cuando se produce la llamada Operación Nube, es decir, un día nublado y con cruceros, por lo que estos visitantes se suman a los que vienen de otras partes de la isla y colapsan los accesos al centro. También aumentan los vendedores ambulantes, contra los que actúan, aunque Bravo destacó que la erradicación de esta actividad es imposible.