"En la Platja de Palma no queremos turismo de borrachera", manifestó rotundo el alcalde, José Hila, a raíz de la organización el pasado fin de semana de una concentración etílica en la zona turística por parte, según se está investigando, de un empresario de la zona.
Hila aseguró que la anterior aseveración se puso de manifiesto cuando, a raíz de la suspensión judicial de la ordenanza cívica, "activamos de forma inmediata la anterior normativa contra el botellón".
En relación a la organización el pasado fin de semana de una concentración etílica en la zona turística Hila insistió en que el Ayuntamiento "utilizará todas las herramientas a su disposición para sancionar al organizador del evento". Al respecto, señaló que ya se han tenido contactos para tratar esta cuestión con los responsables de la conselleria de Turismo y de la delegación del Gobierno.
Por ello la máxima autoridad municipal insistió en que "quien organice este tipo de excursiones se deberá atener a las consecuencias".
Por el momento el Ayuntamiento ha procedido a levantar acta por parte de la Policía de la ocupación ilegal de la vía pública sin permiso, por lo que si se demuestra la organización del evento por parte de un determinado empresario se le puede sancionar en aplicación de varias ordenanzas municipales.
El alcalde insistió en que "el mensaje que queremos lanzar es claro y dirigido a los que organicen estas excursiones: dejen de hacerlo porque vamos a ser estrictos ya que la Platja de Palma se merece otro tipo de turismo".
