Feliu Renom se presentará hoy con "los ojos abiertos" a través de sus 154 dibujos sobre Palma, apunts d'un dibuixant urbà, un volumen que recoge seis años de "deriva urbana". Estará acompañado por Mariona Ràfols y Gabriel Bibiloni en la librería Quars.

"Los cambios en la ciudad vienen de lejos. Ya los vi en la reforma de sa Gereria. Lo que sí he notado es el aumento de la densidad humana que ha provocado que desistiera de estar de pie en algún lugar concreto durante horas porque no podía dibujar. Con todo, la gente es muy amable", concede el ya jubilado neumólogo.

Vinculado al urban sketcher, la corriente de dibujantes que salen a la calle y la dibujan en sus diversas "derivas". La de Renom se fascina ante los juegos de líneas que le otorgan lugares como el puerto de Palma -"podría salir un libro solo de él", apunta-, o la de escenarios llenos de detalles que él acaba dibujando casi a la manera de un "fotoperiodista". En este último sentido destacan escenas de calle dentro de bares como el Cristal, o la charla de dos barrenderos en la plaza del Mercat.

"Planteo un recorrido ordenado por la ciudad, una mezcla de placer por el dibujo, el detalle, y lo que pasa en el instante", señala Feliu Renom.

Placer, "a pie de calle"

La elección del objeto a dibujar "a pie de calle" estuvo condicionada por "el placer que el objeto me prometía si iba a ser dibujado", señala en el prefacio de este libro.

Además del encuentro, del hallazgo fortuito, nunca de la búsqueda previa, el dibujante ofrece alguna explicación o descripción del lugar, de la escena. La búsqueda también la ha resultado gratificante al hombre de ciencia.

No sería suyo si en el libro no se incluyesen dibujos de El Terreno, el barrio que conoce a fondo ya que en él reside desde que se trasladó a Palma en 1977.

"He visto cambios para bien en los últimos años. Se están recuperando las ruinas de edificios históricos", subrayó. A su barrio le dedicó un libro entero.

Gabriel Bibiloni incide en el prólogo al libro que "además de ser un contenedor de arte y belleza, se añade a la larga lista de obras notables que tienen la virtud de dar a conocer Palma a los que la vivimos, a los que se sienten cercanos y a los que estando lejos ahora tendrán otra oportunidad de acercarse y de disfrutarla".

Renom no se queda solo con el centro histórico de la ciudad, ni con los barrios más pintorescos, el médico sale y se adentra en la periferia. En ocasiones de la mano del arquitecto Gaspar Bennàzar en el retrato a s'Escorxador o al Coliseo Balear.