Som Palma -la marca blanca con la que Podemos se presentó a las elecciones municipales de Ciutat- parece abocada a una crisis interna tras haber dimitido en las últimas semanas dos miembros de la comisión de coordinación, el órgano de dirección política de la formación.

Los dimisionarios son Llúcia Munar, quien ocupó el número 16 en la lista electoral del partido, y Félix Maestro. Ambas renuncias se produjeron por discrepancias sobre la gestión interna de Som Palma y llegaron justo después de que Antònia Martín fuera elegida portavoz del partido a mediados de enero. Tras la renovación en los cargos directivos que realizó Som Palma, la facción interna encabezada por los concejales Antònia Martín y Rodrigo Romero ha ganado poder dentro de la formación asamblearia.

A esas dos dimisiones, cabe sumar que un tercer integrante de la coordinadora fue suspendido de militancia hace dos semanas. La Comisión de Garantías de Podemos en Balears, el órgano que se encarga de los procesos disciplinarios de Som Palma, impuso a Javier González -uno de los fundadores de la formación y que también era miembro de la coordinadora- una sanción de un año sin poder formar parte del partido.

Ochenta días después de su última rueda de prensa en el Ayuntamiento, la concejala Antònia Martín confirmó ayer las dos dimisiones y la suspensión de militancia. Sin embargo, la coordinadora y portavoz del partido negó tajantemente que exista una crisis en sus filas. Achacó las renuncias al "cansancio" entre los altos cargos de la coordinadora y al elevado "nivel de implicación horaria del partido". "Os puedo asegurar que no hay división interna", reiteró la concejala.

Martín señaló que el alcalde José Hila (PSOE) no estaba al corriente de la concesión de la beca a su marido antes de que saliera publicado en los medios: "¿Qué influencia hubiese tenido? ¿Cree usted que el alcalde no tiene bastante trabajo como para comentar estas acusaciones?", preguntó la portavoz de Som a la prensa.

Piden una asamblea especial

Martín agregó que sus cargos (tanto el de regidora de Cort como el de portavoz de Som) "siempre están a disposición del partido y del equipo de gobierno". En concreto, la edila afirmó que está "a disposición de la asamblea".

Sin embargo, la necesidad de convocar una asamblea es otra de las cuestiones que se debate entre las diferentes corrientes de Som Palma. Un grupo de militantes promueve la celebración de una asamblea extraordinaria, una iniciativa que de momento no se ve satisfecha. Tras la reforma de los estatutos de Som Palma del pasado otoño, las reuniones ordinarias se deben celebrar de forma obligatoria cada seis meses y la próxima se debería convocar hacia el mes de abril.

Varios integrantes de Som Palma rechazan esperar tres meses y proponen realizar ya un debate sobre la conveniencia de que Antònia Martín continúe al frente del partido tras verse desgastada su imagen. Uno de los pocos cargos que se ha manifestado públicamente por convocar a toda la militancia fue el regidor Aligi Molina, que en la red social Twitter afirmó que lo propondría a los órganos de gobierno de Som Palma.

En ese sentido, está por ver si la rueda de prensa ofrecida ayer por Martín calmará las aguas entre los suyos. Uno de los motivos que le recriminaba un sector de su partido era que la ausencia de explicaciones y la falta de transparencia era incompatible con partidos como Podemos y Som Palma.

Tras oír las justificaciones de la concejala Martín, el grupo municipal Ciudadanos (C's) mantiene la petición de dimisión y ahora amplía responsabilidad al alcalde. La formación naranja pide a José Hila que cese a Martín por no tener "ni la confianza de la ciudadanía ni de la oposición".

"La concejala no es consciente de que a estas alturas la documentación que ha ido apareciendo contradice todas sus afirmaciones", afirmó el portavoz de C's en Cort, Josep Lluís Bauzá, mediante un comunicado.

Martín deberá volver a explicarse a finales de esta semana, cuando comparezca en las comisiones previas al pleno. C's le ha formulado una batería de preguntas sobre la concesión de la beca a su marido y las acusaciones de nepotismo.

En el pleno municipal del próximo 25 de febrero se debatirá la petición de reprobación contra la concejala de Sanidad y Consumo a propuesta del PP, que previsiblemente no prosperará al contar el equipo de gobierno con mayoría absoluta.