El Parlament va a renunciar a seis de las doce plazas de estacionamiento que tiene reservadas en la calle Palau Reial para los coches oficiales y vehículos de seguridad con el fin de que puedan ser utilizadas por los vecinos de la Catedral, después de que se haya prohibido aparcar en el mirador de la Seu, con la supresión de 26 plazas. El concejal de Movilidad de Cort, Joan Ferrer, se reunió ayer con el jefe de gabinete de la presidencia del Parlament, Antoni Jiménez, y acordaron esta renuncia. Por otra parte, Ferrer ha estudiado las peticiones de los vecinos de incrementar plazas de aparcamiento en otras zonas del centro de la ciudad y las ha desestimado por motivos técnicos. Los vecinos, por su parte, han denunciado que el alcalde les ignora y que Cort solo persigue hacer caja con el ofrecimiento de bonos en Antoni Maura.