El fenómeno conocido como el Vuit, que describe la proyección al amanecer de la luz del rosetón mayor de la catedral de Palma sobre la pared bajo el rosetón menor, ha llenado hoy el templo con centenares de personas que han tratado de captar el efecto lumínico "mágico" con sus cámaras y teléfonos móviles.

Cada 2 de febrero la catedral mallorquina se abre para que un número creciente de curiosos disfruten, si las nubes no lo impiden, del fenómeno de la alineación en forma de 8 de la proyección multicolor del gran rosetón que preside la nave del templo sobre el muro opuesto bajo el otro vitral circular de la seo.

Esta mañana han sido centenares de personas las que han acudido a la catedral palmesana para presenciar este espectáculo, que también concita tradicionalmente a muchos curiosos cada 11 de noviembre.

Los juegos lumínicos que produce la conjunción del sol y de la orientación de los rosetones de la Seu tienen otro punto culminante en el solsticio de invierno, el 21 de diciembre, fecha intermedia entre las dos en que se produce "el 8".

Al amanecer de ese día, siempre con permiso de las nubes, el sol proyecta los colores del rosetón mayor sobre el menor, que desde el exterior de la catedral se ve intensamente iluminado en una explosión de colorido.