El área de juegos infantiles de la calle General Riera se reabre mañana tras un mes rodeada de vallas y en obras debido al mal estado del pavimento. Debajo del espacio libre público hay un aparcamiento subterráneo y el material que cubre la superficie entre esta infraestructura y la zona para niños no había sido bien compactado cuando fue construida la plaza en 2006, lo que provocó que se hundiese el hormigón y la capa de goma en la que juegan los más pequeños, tal como explicaron ayer desde la empresa encargada de dicha reparación, contratada por el área de Parques y Jardines del Ayuntamiento.

Durante este último día, los operarios finalizaron los trabajos de colocación de la nueva capa y el repintado de las instalaciones infantiles, aunque las vallas no se retirarán hasta mañana porque hoy esperarán a que se termine de secar tanto la capa de goma como la pintura.

La plaza se encuentra en la calle General Riera número 5, entre Alfred Bonet, Sant Joan de la Salle y Reverend Antoni Tauler, y cuenta con dos grandes áreas de juegos infantiles. La mejora se ha efectuado en la zona que estaba peor, aunque indicaron que en el futuro también se reparará la otra. Entre los diversos arreglos, han tenido que sustituir las patas de las instalaciones infantiles que estaban rotas a causa del hundimiento de una parte del pavimento, según detallaron.

400 metros para niños

Este espacio libre público tiene una extensión de 2.500 metros cuadrados y los juegos ocupan una superficie de alrededor de 400 metros cuadrados. Se abrió a principios de 2007, aunque poco antes de las elecciones de mayo de ese año aún quedaban tramos por terminar y en noviembre tuvo que ser cerrado debido a trabajos de reparación.

En el subsuelo hay 200 plazas de aparcamiento para residentes, que construyó la SMAP (Societat Municipal d'Aparcaments de Palma) en el solar de la antigua clínica Rotger y las vendió con la fórmula de a perpetuidad, en vez de hacerlo con una concesión a 50 años, como es habitual. La SMAP, presidida entonces por Álvaro Gijón, pudo llevar a cabo esta venta gracias al cambio de calificación urbanística de dicho subsuelo de dominio público a patrimonial.