La Empresa Municipal d'Aigües i Clavegueram (Emaya) prepara un plan con el fin de garantizar el suministro de agua a la ciudad pese al déficit de lluvias registrado a lo largo del año pasado y en lo que llevamos de este.
Si bien desde la empresa municipal se insiste en que en estos momentos el suministro de líquido está garantizado pese a que los embalses de Cúber y del Gorg Blau se encuentran a un 25% de su capacidad, la empresa pretende disponer de todas las alternativas posibles en el caso de que no llueva en los próximos meses.
Si bien el contenido del plan aún se desconoce puesto que se está elaborando en estos momentos, desde la empresa indicaron que se van a contemplar distintos escenarios.
En el caso de que en los próximos meses llueva y los embalses acumulen agua suficiente para poder ser utilizada en verano, el plan apenas deberá contemplar la adquisición del agua necesaria procedente de la desaladora para garantizar el suministro.
En el peor de los casos, es decir, que el régimen de lluvias sea nulo como hasta ahora y la capacidad de los embalses no se incremente considerablemente, el volumen de agua que se deberá adquirir será mucho mayor, por lo que también el coste del suministro se incrementará. Ni siquiera en este supuesto, no obstante, se plantea la posibilidad de incrementar las tarifas que pagan los ciudadanos.
Entre las medidas que se pueden incluir en el plan de contingencia en caso de necesidad, se contempla la realización de campañas de concienciación a la población para que moderen el consumo de líquido. También cabe la posibilidad de solo utilizar agua regenerada para regar los parques y jardines, algo que, por otra parte, en estos momentos ya se está realizando en la mayoría de los casos.
Si bien el agua almacenada en los embalses de Cúber y el Gorg Blau solo supone apenas el 10% del suministro anual de líquido a la ciudad los embalses pueden almacenar un máximo de 13 hectómetros cubicos y se necesitan entre 40 y 44 al año para abastecer Palma, se considera que su contribución es muy importante, al menos en los meses de verano.
En estos momentos Emaya capta 99.929 metros cúbicos de agua al día para abastecer la ciudad, una cantidad que supera en 5.000 metros cúbicos el volumen utilizado por la empresa municipal el año pasado en estas mismas fechas.
La aportación de los embalses ahora es nula y tampoco se está utilizando agua adquirida a Abaqua procedente de la desaladora de la bahía de Palma, del trasvase de sa Marineta o de sa Costera. En los pasados meses de noviembre y diciembre se tuvo que adquirir agua en una proporción mucho mayor que en el mismo período de 2014.
En concreto, en noviembre se adquirieron 364.271 metros cúbicos (lo que representaba el 14% del suministro) y en el mismo mes de 2014 se compraron 21.968 metros cúbicos (un 1%). En estos momentos el 97% del suministro procede del acuífero de s'Estremera ( 14.277 metros cúbicos al día), y de los pozos de Can Negret, Borneta y Alaró, con aportaciones diarias de 8.000, 6.679 y 8.838 metros cúbicos.
A este volumen hay que añadir otros 59.452 metros cúbicos que proceden de los pozos del Pont d'Inca, Son Serra, Son Roqueta, sa Vileta y Virgen de Montserrat. Además, las fuentes de la Vila, d'en Baster y de Mestre Pere aportan otros 2.874 metros cúbicos, cuando el año pasado por estas fechas daban un caudal de 49.687 metros cúbicos diarios.
