La portavoz del PP en el Ayuntamiento de Palma afirmó ayer que el alcalde, José Hila, "es una marioneta" de las decisiones de sus socios de gobierno de Més y Som y que actúa "como un rehén", ya que ante los problemas que se suscitan en la ciudad, "se pone de perfil". La representante del grupo conservador en Cort aseguró también en su análisis de los seis primero meses de gobierno del tripartito que los ciudadanos "perciben que Palma está peor que hace unos meses", puesto que es una ciudad "más sucia, menos dinámica y con un mantenimiento absolutamente abandonado".

Al equipo de gobierno le reprochó su "falta de concreción, su sectarismo y su afán de crear problemas en lugar de resolverlos". A su juicio, "cada partido del pacto mira solo por los intereses de su área, con evidentes disensiones internas que procuran disimular, pero que al final se ponen de manifiesto en cuestiones como las dificultades para elaborar el nuevo presupuesto, con su incapacidad de legislar más allá de sus obsesiones ideológicas, de tal forma que las juntas de gobierno son de puro trámite y que en los plenos llevan propuestas que menosprecian a la oposición".

Afirmó asimismo que el tripartito "crea problemas en lugar de solucionarlos", en clara alusión a distintas controversias como el intento de eliminación de las terrazas de es Born.

Al respecto, la portavoz popular recordó que "tuvieron que ser los ciudadanos quienes dijeran no a la idea del Ayuntamiento de quitar las terrazas, a través de una consulta que el gobierno municipal no tuvo más remedio que convocar y que arrojó un resultado más que elocuente a favor de una Palma dinámica y abierta".

Criticó la política de limpieza de Emaya afirmando que en estos últimos meses "hemos vivido el espectáculo lamentable de suciedad y abandono de la ciudad, con zonas en las que se acumulan hasta cinco centímetros de hojas sin recoger con los trastos en plena calle". Durán solo salvó la política de Servicios Sociales, "porque se han limitado a dar continuidad a la ejecutada por el PP", afirmó.