Un año y dos días ha tardado Antonio Maura en volver a su tribuna de la plaza del Mercat. A las 9.30 horas de ayer una grúa depositó los 300 kilos de bronce que forman la escultura mientras el equipo de restauración ultima los trabajos para que el monumento vuelva a relucir.

Con cemento cola y tirafondos fijaron la base de la estatua al pedestal para que la figura de bronce no se vuelva a desplomar, como cuando la rama del ficus le atizó en la cabeza y noqueó al expresidente de España. Pero Maura contará con tres guardaespaldas más para que el conjunto escultórico no se deteriore y resista el vandalismo, las inclemencias meteorológicas y todo lo que le echen.

Durante la próxima semana las restauradoras, Silvia Jovani y Marta López, impregnarán a Maura con tres capas de protección: dos capas de cera y un baño de tratamiento antigrafitis. Esos tres revestimientos -junto a los productos contra la corrosión- deberán proteger al político mallorquín, que en las últimas décadas ha sido objeto de numerosas pintadas. También se aplicarán a la figura de mármol que representa la Verdad y al pedestal de piedra calcárea donde se levantan las dos estatuas.

"La imagen de la Verdad es la que más ha sufrido. Le han pintado las uñas y los ojos; ha perdido el brazo derecho, que fue repuesto hace años, y le faltan dedos de la mano izquierda porque los han roto constantemente. Cuando la han manchado con grafitis, la limpieza ha sido inadecuada y la ha dañado", explicó ayer la responsable de conservación y restauración de Cort, Magdalena Rosselló.

La alegoría de la Verdad es la parte que presenta más mellas, pero no es la única. A la placa trasera de bronce le faltaban letras y algunas se han tenido que reponer para completar la inscripción "Al preclaro hijo de Mallorca, 1853-1929".

"Hoy podemos celebrar que la estatua vuelve a estar entera", declaró el cronista oficial de la ciudad, Bartomeu Bestard. El historiador recordó que el monumento se pagó por suscripción popular gracias a los esfuerzos del poeta Joan Alcover, amigo del expresidente, y de Francesc Maura, pintor y hermano del político.

La previsión es que la restauración de la obra de Mariano Benlliure se complete la semana que viene, dos meses después del inicio de los trabajos por parte de la empresa Mitra Restaura.