Miquel Comas Oliver ha estado apenas tres meses al frente del área de Participación Ciudadana y Coordinación Territorial de Cort. Inició su mandato con un traspiés con las bases de su partido que tuvo que rectificar y ya nunca fue el mismo. Cuando aún no se había conformado el nuevo Consistorio después de las elecciones que llevaron al PP irremediablemente a la oposición municipal, el tripartito que se perfilaba hizo uno de sus primeros anuncios: el cabeza de lista de Som Palma -el partido hermano de Podemos en Ciutat- sería el portavoz del nuevo equipo de gobierno integrado por ellos, el PSOE y Més. El anuncio cayó como un jarro de agua fría sobre unas bases reticentes a entrar en el equipo de gobierno de Cort y mucho menos si éste estaba encabezado por un socialista, como ya se perfilaba. Las bases desautorizaron en asamblea la decisión y Miquel Comas no pudo ser el portavoz del nuevo gobierno municipal, contentándose con ocupar la primera tenencia de alcaldía. Comas, moderado y persona de consenso, desde este momento no fue el mismo. Huía de la prensa y de los periodistas como de la peste, y actuaba siempre midiendo cada palabra que pronunciaba. Ha tenido que actuar frecuentemente como "escudo" entre las bases de su partido, a menudo más radicales, y el equipo de gobierno. Además, no se sabe muy bien si por desconocimiento o a sabiendas, le encargaron una concejalía en Cort con mucho discurso y escasos recursos, como es Paticipación Ciudadana, desde la que la capacidad de decisión sobre los presupuestos municipales y, en especial, sobre su ejecución es más bien escasa por no decir casi nula.
Una persona noble, íntegra e inflexible
Quienes le conocen dicen de él que es una persona noble e íntegra, dos cualidades que explicarían su dimisión por unos motivos que no tienen nada que ver con cuestiones municipales y por unos hechos que ocurrieron antes de su dedicación a la política. Pero también señalan otra cualidad de su persona que puede explicar la decisión adoptada. Es inflexible. Cuando está convencido de algo es difícil hacerle cambiar de opinión. Pero también es una persona, como la inmensa mayoría, capaz de desmoronarse por unos motivos personales que quiere mantener en su más estricta intimidad, algo a lo que tiene derecho, puesto que se trata de una cuestión que no afecta para nada a su gestión municipal.
Defenderá el espíritu original de Podemos
En su misiva de despedida Comas agradece las muestras de apoyo recibidas, a los funcionarios del Ayuntamiento e incluso a los miembros de la oposición "que han sido siempre respetuosos". Afirma asimismo que ha sido "un auténtico honor ser concejal de mi ciudad" y más en representación de Som y Podemos cuyo "espíritu original siempre he defendido y defenderé".
