"Si los promotores de Palma Springs pueden presentar la documentación necesaria no habrá ningún problema a la hora de concederles la licencia", manifestó ayer en su comparecencia ante el pleno el teniente de alcalde de Modelo de Ciudad, Urbanismo y Patrimonio Histórico, Antoni Noguera.

Rercordó que el Ayuntamiento no puede conceder la licencia de obras para el edificio puesto que carece de la autorización preceptiva como centro comercial y que la ley establece un plazo de seis meses para conseguirla, en caso contrario se debe iniciar un expediente de caducidad, tal como han planteado.

El teniente de alcalde compareció ante el pleno a petición del grupo municipal de Ciudadanos para explicar la actuación de Cort en relación al proyecto de ses Fontanelles, el anuncio de supresión de un carril del paseo Marítimo y el de la exención del IBI y de los gastos comunitarios para los bancos que cedan pisos de su propiedad para el programa de alquileres sociales.

En relación a ses Fontanelles, Noguera recordó que hay colectivos como las dos asociaciones de la pequeña y mediana empresa, Afedeco y Pimeco, que están en desacuerdo con este proyecto, al igual que el grupo ecologista GOB. Asimismo, Cort dispone de un requerimiento del Defensor del Pueblo reclamando información sobre la actuación municipal en la tramitación de este expediente. En este sentido el teniente de alcalde indicó que en esta cuestión "no solo hay una empresa -en relación a los promotores del centro comercial- que mira por sus intereses, sino que hay otros colectivos que también defienden legítimamente los suyos".

El concejal Pedro Ribas, de Ciudadanos, criticó que no se tuvieran en cuenta las consecuencias para las arcas munipales si finalmente se paraliza el proyecto. Por su parte, Lourdes Bosch, del PP, recordó que el Govern no dió la autorización comercial, porque el solar no tenía la consideración de suelo urbano.