La plaga de mosquitos que ha proliferado en el último mes en la Platja de Palma tiene su foco en las intensas lluvias de las primeras semanas de septiembre. Así lo explicó ayer el Ayuntamiento de Palma, que se puso manos a la obra para combatir la presencia de este insecto.

La empresa contratada para el control de plagas, Lokímica, trajo desde la península un helicóptero para esparcir pesticida sobre las zonas húmedas del Pla de Sant Jordi y ses Fontanelles. Se trata de un medio utilizado una vez al año y que los expertos en insectos definen como muy eficaz.

En los últimos días, los técnicos de Lokímica y Cort acotaron un área de unas 300 hectáreas en las cuáles no llegan los camiones con los que fumigan durante el resto del año. El helicóptero se centró en pulverizar el líquido pesticida en 50 de esas 300 hectáreas. Especialmente en acequias, torrentes, zonas de agua estancada, el embalse de Can Guidet y otros puntos específicos donde es más fácil que críen los mosquitos comunes.

Según explicó el responsable de Lokímica, Noé García, el pesticida aplicado ayer es una variante Bacillus thuringiensis. Se trata de un larvicida diseñado específicamente para el mosquito común. La regidora de Sanidad de Cort, Antònia Martín (Som Palma), insistió en que este producto "no afecta al mosquito tigre ni a otros insectos voladores que puedan ser beneficiosos para el campo, como las abejas".

Martín afirmó que las lluvias de septiembre junto con las altas temperaturas han acortado el tiempo de crecimiento de los mosquitos. Señaló que ahora es un buen momento "para sacar la artillería pesada" ante la previsión de nuevas lluvias.

El Ayuntamiento explicó que el uso del helicóptero es un refuerzo a los trabajos ordinarios de fumigación, que se realizan mediante camionetas. El aparato realizó ayer una docena vuelos para repartir el producto en las zonas verdes y evitar la reproducción del insecto. Gracias al uso de un sistema de posicionamiento, tanto Lokímica como Cort dispondrán de datos -con escaso margen de error- de los puntos exactos donde se ha aplicado el pesticida y en qué cantidad.

Después del uso extraordinario del helicóptero, que ayer finalizó su tarea, la campaña contra el mosquito común se prolongará hasta noviembre mediante medios terrestres.

La concejala Martín explicó que, aparte de las causas naturales que facilitan la acumulación de agua en el Pla de Sant Jordi, la "falta de planificación ha complicado la evacuación de agua de forma natural a través de las acequias, que han quedado cortadas por la construcción de la autopista o del polígono de Son Oms".

Precisamente, ayer varios operarios trabajaban para limpiar una zona de agua estancada cerca del aeropuerto y el edificio Mirall que causaba un olor hediondo.