El primer día del corte de un tramo de la carretera que une Palma y Manacor, a la altura de la rotonda de Son Ferriol, provocó colas kilométricas de vehículos que circulaban dirección al centro. La afección se debe a instalación de tubos para el futuro cruce de agua y electricidad en el subsuelo de dicha carretera. Las vías más afectadas fueron tanto la Ma-15 como la Ma-15D, conocida como la carretera vieja de Manacor, que recorre paralelamente la localidad de Son Ferriol.

Pese a que a primera hora la circulación parecía fluida y sin complicaciones, a media mañana el atasco alcanzó tal magnitud que se vieron afectadas, con retenciones menores, las otras salidas de las dos rotondas que dan acceso a Son Ferriol. Para evitar el caos, provocado por el elevado número de desplazamientos que se realizaron durante la mañana con dirección al centro de la ciudad, el Consell de Mallorca decidió modificar la ruta inicial que había planeado para los seis días de obras.

Varios operarios se encargaron de tapar con plástico los carteles que indican la salida de la rotonda y vallaron el tramo de carretera dirección Palma para evitar que algún despistado accediera a la zona en obras. El plan inicial era que los vehículos se dirigieran a la capital utilizando la carretera vieja de Manacor, con la obligación de desviarse en la salida 7 y entrar por dentro del la barriada de Son Ferriol. En ese tramo en pocas horas se colapsó el único carril de circulación dirección al centro de la ciudad, lo que obligó al Consell a buscar una alternativa.

Esta situación provocó el desespero y enfado de muchos conductores que tuvieron que avanzar lentamente por el kilómetro y medio en el que se juntaron los usuarios que procedían de otras localidades con los habitantes de Son Ferriol, que deseaban salir de su barrio. "No se les ocurre mejor momento para hacerlo que la semana que se une el fin de las vacaciones con el inicio del trabajo", exclamaba uno de los conductores. "Parece que solo piensan en el turista y no en el que vive aquí", añadió el hombre.

Nueva ruta

Para minimizar el impacto de las obras, el Consell decidió modificar por la tarde el desvío de la carretera aunque con ello no evitó que continuaran las retenciones en las proximidades al tramo cerrado por obras. Con este cambio, los usuarios, que estaban obligados a coger la salida número 7 (Son Ferriol y sa Casa Blanca), deberán ahora continuar por la misma carretera de Manacor hasta la rotonda. Una vez en ese punto, según explicaron desde la institución insular, se desviarán hasta la rotonda de Son Ferriol donde podrán continuar su camino hacia Palma por la carretera vieja de Manacor. Con este cambio se evita el atasco de la vía de un solo carril que recorre la localidad.

Respecto a las obras, el Consell aseguró que una vez acabada la primera fase, que se corresponde con las del tramo de carril en dirección a Palma, comenzarán las tareas de instalación de los tubos de agua y electricidad en la misma carretera pero con sentido a Manacor. Debido a que esta modificación no ha alterado el normal desarrollo de las obras, continúa previsto que la primera fase acabe el próximo 2 de septiembre y que la segunda se extienda durante tres días más, hasta el día 5 de este mismo mes.