El paseo Marítimo pasará a ser competencia del Ayuntamiento. Es el acuerdo al que llegó ayer el concejal de Urbanismo, Antoni Noguera, con el presidente de la Autoritat Portuària, Joan Gual, en la primera reunión entre las dos administraciones. A partir de septiembre iniciarán los trámites de cesión de la titularidad de la importante vía, que ahora recae en el organismo estatal.

A pesar de que "se trata de un proceso administrativo largo, a corto y medio plazo se pueden llevar a cabo proyectos puntuales que ayudarán a dibujar el futuro de la fachada marítima", tal como explicó Noguera. El objetivo es lograr "una ciudad más habitable, más amable, abierta al mar y a los paseantes", por lo que una de las primeras medidas anunciadas es "reordenar la movilidad de la fachada marítima a través de la reducción de carriles de tráfico, la ampliación de carriles bici, etc.", con la finalidad de convertir el Marítimo en "un gran eje cívico", en palabras del concejal, que se basa en el proyecto presentado durante el pasado mandato por quien actualmente es el gerente de Urbanismo del consistorio, el arquitecto Joan Riera.

S'Aigo Dolça

Otra propuesta que Cort quiere desarrollar esta legislatura es la rehabilitación del complejo de s'Aigo Dolça, en el que hay una piscina y que el área de Modelo de Ciudad pretende "recuperar para los vecinos de El Terreno y conectar el barrio con el mar", tal como detalló el regidor.

Respecto a la reunión con Gual de Torrella, destacó que ambos coinciden en "construir espacios de trabajo y diálogo permanente para avanzar en los proyectos que afecten e interesen a las dos partes". Noguera resaltó el "buen entendimiento y predisposición del presidente de la Autoritat Portuària para abrir canales de comunicación y coordinación", debido a que este organismo ha sido criticado por actuar como un reino de taifas.

En el encuentro, celebrado en la sede de la entidad del Puerto, también estuvieron presentes el director de Urbanismo, Gabriel Horrach, y el gerente de este área municipal, Joan Riera.