La Oficina Antidesahucios de Palma, que empezó a funcionar el pasado lunes, evitó ayer el primer desalojo de una vivienda de alquiler, que afectaba a una madre con tres hijos menores.

El teniente de alcalde de Modelo de Ciudad, Urbanismo y Vivienda Digna, Antoni Noguera, informó ayer de este hecho que calificó como de "importante" y agradeció la implicación de los funcionarios de la nueva oficina, así como la sensibilidad de la ciudadanía para evitar los desahucios.

El teniente de alcalde detalló que el martes por la tarde se tuvo conocimiento de la existencia de este caso, que debía ser ejecutado por funcionarios judiciales a las nueve y media de la mañana de ayer.

El desalojo se había ordenado por el impago del alquiler al propietario de la vivienda ocupada por la persona que debía ser desahuciada, cuya deuda ascendía a 1.000 euros.

Según Noguera, el Ayuntamiento, junto con Cáritas, han conseguido mediar con el propietario de la vivienda, quien ha aceptado el pago de dos meses a cambio de dejar que esta familia continúe en la vivienda hasta el próximo mes de septiembre, cuando la mujer tenía previsto abandonar la ciudad con sus tres hijos de ocho, seis y cuatro años de edad, para reunirse con su pareja. Tras el acuerdo alcanzado, el juzgado ha paralizado el desalojo poco antes de que se llevara a cabo. La puesta en funcionamiento de una oficina antidesahucios municipal era uno de los puntos incluidos en el pacto de gobernabilidad entre el PSOE, Més y Som. Está abierta al público desde el pasado lunes en unas dependencias municipales de la calle Ferreria y está atendida por seis funcionarios.