El equipo de gobierno del ayuntamiento de Palma ha decidido paralizar la tramitación de los pliegos para la adjudicación del Servicio de Acogida Municipal (SAM) porque, en palabras de la concejala de Bienestar y Derechos Sociales, Mercè Borràs, "no garantizan segundas oportunidades a las personas".

Al término de la junta de gobierno celebrada ayer, Borràs, acompañada por la teniente de alcalde de Ecología y portavoz del equipo de gobierno, Neus Truyol, explicó que "desde el primer día de gestión en la concejalía, todos los técnicos y jefes de servicio nos han solicitado la paralización de este expediente por las numerosas deficiencias que había en los pliegos".

En opinión de la concejala, se trata de unas deficiencias "que no garantizan un servicio adecuado" y que, además, según se indica en el informe técnico que acompaña la decisión, "en la coyuntura actual, los pliegos podrían no ajustarse a la nueva configuración que se quiere dar al servicio, hasta el punto de no alcanzar los fines que se pretenden" por parte del área.

En otro punto de la documentación que acompaña a la decisión, se indica que "se han dado una serie de cambios en la coyuntura social que hacen que técnicamente tengamos que replantear el servicio en su conjunto".

Por ello, consideran "imprescindible que se pueda replantear la situación con el fin de que los pliegos se puedan adaptar a la realidad y a las necesidades del colectivo al que van dirigidos y poder dar una mayor coherencia y optimización de los recursos del municipio de Palma".

La tramitación de los nuevos pliegos se inició en octubre de 2014 mediante la aprobación del inicio del expediente y las cláusulas administrativas para la adjudicación. Hubo un primer período de alegaciones en el que algunas fueron estimadas parcialmente. Después se abrió otro, en el que solo se atendieron cuestiones de forma.

Convenio con es Convent

Mientras tanto, se procedió a conveniar con el centro privado de es Convent 54 plazas del servicio de acogida a familias con el fin de complementar las ofertadas por el Ayuntamiento. Desde el pasado viernes solo se derivan familias a este servicios privado cuando el municipal está lleno.

El incremento de plazas, junto al aumento de las ayudas urgentes para el pago de alquileres, hipotecas o gastos de mantenimiento de la vivienda, ha propiciado que desde el año pasado no se hayan tenido que alquilar plazas en pensiones para acoger a las personas y familias que se quedan temporalmente sin su casa.

En la actualidad, el SAM dispone de 222 plazas distribuidas en varios centros y da servicio a adultos sin vivienda, familias y a víctimas de violencia de género.

En el primer trimestre del presente año acogió a una media mensual de 182 personas sin techo, una cifra inferior a la registrada en 2013, cuando la demanda de ocupación de los centros para personas y familias sin vivienda era de entre 190 y 210 usuarios, superior a las 144 plazas disponibles en aquel momento, de ahí que se tuvieran que alquilar pensiones. Ayer el número de personas acogidas era de 124 personas.

Los pliegos que ahora han sido suspendidos preveían un gasto de 1,6 millones. Desde su aprobación inicial fueron muy criticadas por distintos colectivos, entre ellos el grupo municipal socialista, que presentó alegaciones porque, entre otras cuestiones, no incluían ni el número de usuarios a atender, ni los edificios y los espacios en los que se desarrolla el servicio.

Asimismo, los socialistas denunciaron que los nuevos pliegos introducían nuevos recortes. En concreto, aseguraron que no contemplaban la presencia de orientadores laborales, ni la presencia de programas de promoción y formación laboral para los usuarios, además de eliminar las cláusulas sociales existentes antes de la presentación de alegaciones.

En aquel momento, tanto el PSOE como Més, en la oposición, manifestaron su preocupación por el futuro del servicio y su temor a que el equipo de gobierno de entonces provocara un cambio de modelo más orientado a la beneficencia.