PSOE, Més y SomPalma han sido capaces de consensuar en tiempo récord un programa de gobierno que incluye, entre otros documentos, un conjunto de medidas urgentes, otras de coste cero y un código ético. No obstante, las negociaciones han quedado paralizadas a la hora de designar quién de entre los tres cabezas de lista de los partidos que intentan coaligarse para alcanzar un acuerdo debe ostentar la alcaldía.
El PSOE ha puesto sobre la mesa su voluntad de que José Hila, por encabezar la lista del partido más votado de entre los que quieren pactar, debe ser el futuro alcalde, una cuestión que SomPalma, la marca blanca de Podemos, no puede aceptar sin consultar previamente a sus bases.
Si bien los dirigentes de SomPalma decidieron ayer no atender los requerimientos de este periódico, se sabe que Miquel Comas insistió una y otra vez en que no podían apoyar la propuesta de organigrama municipal presidido por José Hila porque sus bases probablemente no lo aceptarían.
Tres opciones
Por ello, han decidido aplazar las negociaciones a la espera del resultado de la asamblea que SomPalma ha convocado para el próximo lunes. Se celebrará a partir de las seis de la tarde en el auditorio de la ONCE y, en ella, los militantes de esta formación política deberán decidir entre tres posibles opciones.
La primera posibilidad consiste en que los militantes de SomPalma no apoyen el documento consensuado entre los negociadores y, en consecuencia, que gobierne la lista más votada. En este caso, si uno de los posibles candidatos de los partidos de izquierda no alcanza la mayoría absoluta (el voto de quince concejales) será automáticamente proclamada alcaldesa la candidata del PP, Margalida Durán, por encabezar la lista que obtuvo mayor representación (9 concejales) de entre todas las que se presentaron a las pasadas elecciones municipales.
La segunda opción que podrán votar los militantes de SomPalma consiste en aprobar los documentos negociados, entre ellos el del organigrama con José Hila como alcalde, además de dar su consentimiento para que sus cinco concejales puedan aceptar áreas de gobierno.
Por último, la tercera opción que los militantes de SomPalma podrán escoger, consiste en dar su apoyo al pacto, aunque sin entrar en el gobierno municipal.
Ante esta situación de parálisis, tanto Més como el PSOE decidieron aplazar su asamblea de militantes y el Consell Polític, que debían celebrar el lunes, al próximo miércoles a la espera de la decisión de los militantes de SomPalma.
Més remitió ayer una carta a sus militantes explicándoles el motivo del aplazamiento de la asamblea. Aunque no se definen por la persona que debe ostentar la alcaldía, inciden en que consideran que "la mejor opción para un gobierno fuerte y estable para llevar a cabo políticas valientes y trasformadoras en Palma es la de un gobierno que incluya las tres fuerzas políticas de la izquierda".
En la misiva aseguran que "en el marco de las negociaciones, Més per Palma solo ha planteado la condición de construir un gobierno integrado por las tres fuerzas y la de consensuar un programa transformador. Según esta misiva, el PSOE "ha puesto sobre la mesa una condición irrenunciable para construir un gobierno de pacto, que es la de obtener la alcaldía", mientras que SomPalma "se muestra reticente a conformar un gobierno si este está liderado por el PSOE al frente de la alcaldía".
Ilusión y voluntad en el PSOE
Por su parte, desde el PSOE manifestaron que seguirán trabajando "con ilusión y voluntad para que sea posible un gobierno progresista en Palma".
Indicaron que han puesto sobre la mesa el criterio de que quién debe ostentar la alcaldía de entre los coaligados es la persona que encabeza la lista más votada, "tal como se está negociando en otras ciudades con otras formaciones políticas". En este aspecto insistieron en que los socialistas "no somos más que nadie ni menos que nadie".
Desde este partido consideraron que "las negociaciones no están rotas. Los socialistas insistieron en que los contactos se pueden reemprender en los próximos días -antes o después del lunes- con el fin de "encontrar entre todos una solución imaginativa", que desbloquee la elección del futuro alcalde de Palma.
