Los agentes de la Policía Local del distrito centro y la Platja de Palma -las dos zonas turísticas- tienen la orden de impedir las ocupaciones en la vía pública de "venta ambulante de todo tipo", los artesanos especializados en pulseras y láminas, los dibujantes de carteles con el nombre propio, los payasos y los malabaristas, tal como se lee en la instrucción que el Ayuntamiento ha aprobado para hacer cumplir la ordenanza cívica. Las citadas actividades "no serán permitidas en ningún lugar de esta ruta", según añade el texto en referencia al recorrido que los visitantes realizan por el casco antiguo.

El texto recuerda que las únicas ocupaciones permitidas son las de los pintores y caricaturistas, así como las de músicos y cantantes. No obstante, tal como establece la normativa aprobada durante esta legislatura que ahora acaba, deben cumplir una serie de condiciones. Por ejemplo, los artistas callejeros tienen un espacio máximo donde poder desarrollar su actividad. Los pintores tienen que vender material creado por ellos, no por otros ni prefabricado. En cuanto a los músicos, no se les permite el uso de generadores de corriente "ni instrumentos de percusión o de sonido estridente molesto para el vecindario". Ninguno puede ubicarse frente a monumentos ni edificios muy concurridos.