La Fira del Caragol de Sant Jordi, que ayer cumplió su XV edición, notó la inminencia de las elecciones municipales y autonómicas debido a que en el abarrotado pueblo había muchos políticos a la caza del voto. No obstante, el auténtico protagonista del evento fue el caracol, que se sirvió cocinado de diferentes maneras.

Y como en toda feria que se precie, hubo diversos puestos de artesanía, gastronomía y otros productos mallorquines, así como ropa y complementos, bisutería, etc