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Ordenanza

El civismo busca consolidarse en la Platja de Palma

La zona turística afronta su segunda temporada veraniega con una ordenanza municipal que tiene entre sus objetivos mejorar la imagen y la oferta

Un tercer letrero advierte de la ilegalidad de la venta ambulante.

El centenar de carteles sobre la ordenanza cívica que cuelgan de las farolas de la primera línea de la Platja de Palma recuerdan que está prohibida la música a todo volumen, la venta ambulante, el juego del trile, el botellón y los masajes en la playa. La pasada temporada turística, cuando se aprobó la normativa municipal, los letreros fueron colocados por la Policía Local para disuadir a los posibles infractores y, pese a que "todavía queda mucho por hacer", según el presidente de la asociación de vecinos de la zona, "es imprescindible que este año se consolide el cumplimiento de la ordenanza cívica para mejorar la imagen de la Platja de Palma", en palabras del presidente de los hoteleros.

Francisco Nogales y Francesc Marín, respectivamente, creen que "se va por el buen camino", aunque el primero advierte de la necesidad de "educar antes que sancionar. Los carteles cumplen dicha función, aunque eso no es suficiente". Además, considera que hay vecinos y empresarios que también tienen "parte de responsabilidad", debido a que promueven el incivismo, como "quienes dejan muebles viejos, trastos y basura en la calle o los restauradores que se exceden en la vía pública con las terrazas de sus bares", enumera. El concejal de Turismo de Cort, Álvaro Gijón, le ha asegurado que este año marcarán el espacio máximo de cada terraza. "Si nosotros mismos no damos ejemplo, ¿cómo lo van a hacer los turistas?", argumenta Nogales.

Para el portavoz de la patronal hotelera, es muy importante que el nuevo equipo de gobierno que salga tras las elecciones de mayo "continúe el trabajo realizado hasta ahora, que no se olvide de la Platja de Palma, porque tiene 40.000 turistas y cerca de 20.000 residentes". Marín se congratula de que este año, por primera vez, el Ayuntamiento ha destinado a la zona efectivos del GAP (Grup d'Actuació Preventiva) durante la temporada alta, en concreto, ocho policías que comenzaron a trabajar allí la pasada Semana Santa. El portavoz de los vecinos también pide al nuevo gobierno "que no se despiste, ya que no se puede perder el trabajo hecho hasta ahora".

A medida que vaya avanzando el verano, se podrá comprobar si el civismo se consolida o sigue habiendo botellón en la playa, música a gran volumen, trileros, carteristas y todo lo que ha sido la Platja de Palma hasta ahora. La jornada de ayer fue tranquila y, mientras los turistas disfrutaban del sol y las terrazas abiertas, operarios de Parques y Jardines de Cort pintaban los bancos y los juegos infantiles de la plaza de les Meravelles para que todo quede a punto para la temporada que acaba de comenzar.

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