La jueza Carmen González, que instruye el caso sobre la posible corrupción en la Policía Local de Palma, dictó una orden de alejamiento del inspector Joan L., detenido el pasado lunes, que le prohíbe acercarse a varios locales nocturnos de s'Arenal relacionados con la trama. Tras prestar declaración en el juzgado, el oficial de Policía quedó en libertad con esta medida cautelar.
El inspector de la Policía Local Joan L. fue arrestado por agentes de la Brigada de Extranjería de la Policía Nacional sobre las diez de la mañana en su puesto de trabajo, en el cuartel de Sant Ferran. Los investigadores realizaron un registro en su despacho y esa misma mañana lo condujeron ante la jueza.
La presunta relación del inspector con la trama corrupta de agentes que investiga tanto la Policía Nacional como la Guardia Civil en la operación Sancus se desprendería de las últimas actuaciones, a finales de febrero, cuando fueron detenidos un conocido empresario con intereses en hoteles y locales de ocio nocturno de s'Arenal y el encargado de un local de striptease. Este último manifestó en su declaración que tenía órdenes de su jefe de dejar que determinados policías consumieran copas gratis en el establecimiento. Los investigadores sospechan que también disfrutaban de servicios sexuales sin pagar, aunque el empleado manifestó que él no sabía lo que hacían las chicas en los reservados.
Precisamente este sería uno de los locales a los que el inspector detenido tendría prohibido acercarse a partir de ahora, como medida cautelar, presumiblemente para que no tratara de ponerse en contacto con alguno de los testigos del caso. La operación Sancus, que investiga relaciones irregulares entre policías y empresarios de s'Arenal, ha conducido hasta ahora al arresto de diez agentes, un empresario y un empleado.
