La investigación de la presunta trama de corrupción de la Policía Local de Palma abrió ayer una nueva fase con la detención, por primera vez, de una persona ajena al Ayuntamiento de Palma. Se trata de un conocido empresario de la Platja de Palma, M. P. B., máximo responsable de uno de los holdings empresariales con mayor presencia en s'Arenal. Fue detenido en su domicilio a última hora de la noche del martes, aunque el arresto no se conoció hasta ayer por la mañana, cuando los investigadores registraron su casa y las oficinas de al menos uno de sus hoteles en busca de pruebas.

La Fiscalía sospecha que el grupo investigado podría haber beneficiado económicamente a varios agentes de la Policía Local a cambio de recibir prebendas para sus empresas. Entre las conductas que se atribuye a la trama policial corrupta, estaban la de avisar a los propietarios de locales de la Platja de Palma antes de que les realizaran una inspección o la de hacer la vista gorda con conductas irregulares que pudieran tener algún tipo de penalización.

Según relata la jueza en un auto del mes de enero, existen "indicios relevantes y plurales" de que los agentes imputados recibían copas, servicios sexuales o contraprestaciones económicas en forma de contratos de seguridad o para tapizar los locales de ocio nocturno.

El grupo Pabisa posee en la zona numerosos negocios relacionados con el sector turístico: tres hoteles, un aparthotel, locales de restauración y bares de ocio nocturno. Entre ellos una gran instalación destinada especialmente al público alemán que se encuentra en la apodada calle del jamón.

La detención fue ordenada por la jueza de instrucción número 12 de Palma, María del Carmen González, que lleva todas las investigaciones relacionadas con la presunta corrupción en la Policía Local de Palma. Las actuaciones fueron coordinadas junto al fiscal anticorrupción Miguel Ángel Subirán.

Los agentes del Grupo de Delincuencia Económica de la Policía Nacional y los de la brigada de información de la Guardia Civil se encargaron de los registros, que comenzaron a primera hora de ayer y se prolongaron hasta la noche. El empresario detenido asistió a las inspecciones de los policías junto a su letrado, Eduardo Valdivia. El caso sigue bajo secreto de sumario, por lo que no se conoce la imputación exacta contra el empresario.

Lo que sí trascendió es que, antes de practicar la detención, se han realizado varias escuchas telefónicas y se han rastreado otras empresas de la Platja de Palma. En el último mes (desde que se produjeron las últimas detenciones por corrupción policial a mediados de enero) han pasado por los juzgados de la avenida de Alemanya numerosos testigos, sobre todo policías locales y empresarios perjudicados por la presunta trama corrupta.