El portavoz de Més per Palma, Antoni Verger, y la concejala y candidata a Cort, Neus Truyols, han denunciado el proceso de degradación que vive el eje cívico de Blanquerna y han explicado la propuesta de su partido sobre la necesidad de que estas vías cuenten con unos instrumentos normativos como los planes de usos, que limiten y restrinjan determinadas actividades, como bares y restaurantes.

Més per Palma ha destacado que la pasividad del Partido Popular está provocando que Blanquerna se convierta en una nueva calle Fàbrica, donde hay un grave conflicto entre vecinos y restauradores.

Según Neus Truyols, "es necesario establecer planes de usos que garanticen ejes cívicos equilibrados y habitables, con diversificación de actividades comerciales y de ocio que promuevan la convivencia ciudadana".

Los dirigentes de Més se refirieron a dos problemas concretos y graves: la sobreocupación del espacio público y la alta concentración de bares y restaurantes en la calle. "Cada día vemos cómo comercios tradicionales, como ferreterías, floristerías, zapaterías o tiendas de frutos secos, cierran y son sustituidos por bares y restaurantes y sus respectivas terrazas permanentes que coupan y privatizan buena parte del espacio público", afirmó Verger.

Més per Palma ha presentado una moción que se discutirá en el pleno en el que insta al equipo de gobierno a modificar la Ordenanza de Ocupación de Vía Pública para garantizar que como mínimo el 50% del espacio útil no sea ocupado.