Un grafiti franquista que muestra el yugo y las flechas (y otra pintada en forma de aspa de color verde) lleva más de cinco meses en la muralla de Palma. Ni las denuncias de la oposición han conseguido que el Ayuntamiento de Palma haya actuado para borrar esta señal de un lugar muy transitado. Como que la muralla está protegida, Cort necesita el permiso de Patrimonio del Consell para eliminar la pintada.