El mercadillo de Navidad reabrió ayer con ganas de conquistar un año más a los compradores palmesanos. La plaza Major, la Rambla, vía Roma, la plaza de España y la de la Porta Pintada vuelven a ser protagonistas de una muestra comercial con pocos cambios respecto a años anteriores.
Unos 150 comerciantes ocuparán las 200 casetas que ha instalado el Ayuntamiento. Los negocios estarán abiertos cada día hasta el 6 de enero, entre las 10 y las 21 horas.
Los dulces se mantienen como uno de los productos con más presencia. Habrá diez casetas para vender chucherías, churros o algodón de azúcar.
En la Rambla el gremio de artesanos compartirá espacio con las floristerías y las cada vez más numerosas terrazas. Una de las paradas de dulces ofrecerá Glühwein, un vino caliente con aroma de canela. Jorge Scholz y Alberto Alarcón se encargan de servir esta bebida típica de Alemania. "Mucha gente la descubre en los mercadillos navideños alemanes y se sorprenden al verla aquí", explica Scholz. Como novedad, este año prepararán un caipirinha caliente que promete sorpresas.
En la plaza Major se mantienen los belenistas, junto a una muestra de artesanía mallorquina y de otros productos tradicionales. Biel Segura es uno de los vendedores de figuras y espera que este año tengan mucho éxito los caganers del rey Felipe y la reina Letizia.
"Cada vez hay más gente que compra figuras de belén con movimiento", afirma, y por eso este año ha traído más variedad. "También tienen mucha salida los nacimientos infantiles", formados por figuras de estilo naíf.
En la vía Roma, se podrán degustar productos alimenticios. Miel, queso o dulces serán algunos de los manjares disponibles.
Por último, en la plaza de la Porta Pintada y la plaza de España estarán representadas siete asociaciones y ONG, junto a otros feriantes. La entidad de tutela de menores A Més, la agrupación cultural rusa Liubava, los animalistas de Baldea, la Asociación de Ayuda al Chad, la asociación de síndrome de Dawn Asnimo, la Asociación de Inmigrantes Senegaleses Yapo y la Unión de los Marroquíes aportarán el lado más solidario a la feria navideña.
