La piqueta respetará la puerta original del Lluís Sitjar, así como el escudo del Real Mallorca situado en su fachada, tal como explicó el teniente de alcalde Jesús Valls. También se prevé señalar topográficamente las esquinas del terreno de juego. Si bien las obras de demolición se iniciarán hoy por parte de la empresa Bartolomé Ramón en base a un proyecto aprobado el pasadomes de julio, no se prevé que las excavadoras entren en el estadio en un mes. Primero se realizará el cerramiento del recinto además de todos los preparativos necesarios para ejecutar las obras por parte del Ayuntamiento en los próximos cuatro meses. Los trabajos se inician cuando se cumplen los dos meses de la notificación de la demolición a los copropietarios. El Real Mallorca fue informado ayer.