El Ayuntamiento de Palma prevé que el solar de 27.000 metros cuadrados que ocupa el actual campo de fútbol en desuso se incorpore en un futuro al espacio libre público de la denominada Cuña Verde, de la que también formará parte el actual parque de sa Riera. El teniente de alcalde de Urbanismo de Cort, Jesús Valls, puntualiza que se tratará de una zona verde con equipamientos de carácter deportivo y de otra índole, con el fin de que puedan dar servicio a las barriadas colindantes, en especial a la de es Fortí.

Si bien la previsión anterior es la que figura en el avance del nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de la ciudad y en ella están de acuerdo todos los partidos políticos con representación en Cort, cuando finalice la demolición en abril del próximo año, el solar resultante seguirá siendo de los copropietarios y del Real Mallorca, con el uso de equipamiento deportivo privado. Así pues el Ayuntamiento deberá adquirir el solar si lo quiere incorporar al disfrute de la ciudad. Ya ha descartado la posibilidad de expropiarlo debido, entre otras circunstancias, a la falta de fondos, por lo que cabe la posibilidad de retomar las negociaciones con el Real Mallorca y los copropietarios del Lluís Sitjar con el fin de acordar una permuta entre los terrenos del Lluís Sitjar, que pasarían a ser propiedad del Ayuntamiento y las instalaciones de Son Moix. En estos momentos el Real Mallorca disfruta del usufructo de Son Moix hasta el año 2065.

El acuerdo podría incluir, o bien el incremento del tiempo de uso de estas instalaciones o, lo más probable, que el Mallorca pase a ser propietario de su totalidad o de un porcentaje. Por su parte, los copropietarios han negociado con el Ayuntamiento la posibilidad de renunciar a sus títulos de propiedad del Lluís Sitjar a cambio de un pase o dos en Son Moix.

Una de las cuestiones que el equipo de gobierno ha dejado claras al Mallorca es que no va a incrementar la actual edificabilidad de Son Moix. Valls explicó que precisamente esta negativa supuso que se dieran por concluidas hace meses las conversaciones con actual presidente del Mallorca, Biel Cerdá, puesto que exigía aumentar la edificabilidad de Son Moix con el fin de posibilitar un gran centro comercial. Valls explicó que los actuales 67.000 metros cuadrados del actual estadio son suficientes, teniendo en cuenta que el 45 por ciento se puede destinar a equipamientos, ente los que se incluye el comercial.