Los miembros del consejo de administración de Emaya han sido citados a declarar este martes por el juez de instrucción número 6 de Palma, Miguel Florit, por presunta apropiación indebida tras ejecutar un aval de Envac, la empresa que instaló la recogida neumática.

El juez ha admitido a trámite una querella presentada por Envac y ha citado a declarar al concejal del PP y presidente de Emaya, Andreu Garau, y a los otros ocho miembros del consejo de administración.

Envac se ha querellado contra el consejo de administración de Emaya por quedarse con un aval bancario de 240.000 euros. La empresa privada considera que se le debería haber devuelto ese dinero hace ocho años.

En 1998, las empresas Envac (entonces Centralsug) y Dragados y Construcciones, constituidas en una UTE, construyeron el sistema de recogida neumática de basuras de Palma.

Una de las cláusulas del contrato era que debían constituir una fianza por valor del 4% del importe de adjudicación, que debería ser devuelta en el plazo de un mes desde la recepción definitiva de las obras.

La recepción definitiva de la recogida neumática fue certificada por Emaya el 1 de marzo de 2006, con lo que el aval debería haber sido devuelto en abril de 2006, según la compañía adjudicataria.

Envac considera que Emaya mantuvo indebidamente en su poder durante ocho años el citado aval y ha presentado la querella porque la empresa municipal decidió ejecutarlo el pasado julio e incorporar la cuantía a su patrimonio.

Por contra, Emaya responsabiliza a las dos empresas de los problemas que han acabado con la clausura de la recogida neumática. Por ello, Emaya puso una demanda civil contra Envac el pasado julio, en la que reclama una indemnización de 26,5 millones de euros por daños y perjuicios sufridos.